Aunque puede parecer inevitable, hay mucho que puedes hacer para fortalecer tus huesos y reducir riesgos. Una de las estrategias más efectivas es integrar ejercicios para la osteoporosis en tu rutina.
La osteoporosis es una enfermedad silenciosa que afecta a más de 200 millones de personas en todo el…
El síndrome de Cushing es una condición médica que se caracteriza por niveles anormalmente altos de cortisol…
La herencia familiar determina la estructura del esqueleto y la resistencia de la microarquitectura de los huesos….
Antes de abordar esta pregunta, es importante entender el proceso básico de caminar o la marcha. Conociendo bien cómo funciona nuestro caminar, podremos analizar de manera más informada si el uso de pesas en los tobillos nos ofrece los beneficios que esperamos.
La diabetes y la osteoporosis son dos condiciones de salud que, aunque distintas, están estrechamente relacionadas, especialmente en las mujeres. Entender esta conexión es esencial para una mejor gestión de la salud.
Las fracturas vertebrales ocurren cada 22 segundos en personas mayores de 50 años debido a la pérdida de densidad ósea. Conoce las señales, factores de riesgo y cómo prevenir y tratar a tiempo. La salud de tu columna es esencial; no la descuides.
La vitamina D, crucial para nuestra salud ósea y general, se obtiene principalmente a través de la exposición al sol. Descubre cómo maximizar sus beneficios y cómo una exposición solar adecuada puede mejorar tu bienestar, mientras te proteges de forma segura.
¿Sabías que la prueba de levantarse y sentarse por 30 segundos puede ser un indicador de tu longevidad y riesgo de caídas? En este artículo, exploramos cómo realizar este test y cómo interpretar los resultados en función de tu edad. Además, ofrecemos consejos sobre cómo iniciar un entrenamiento específico para mejorar tanto la fuerza como la potencia de tus piernas. Actúa ahora para mejorar tu salud y bienestar a largo plazo.
Los ejercicios de agilidad y potencia son clave para mantener la fuerza y la explosividad de los músculos, lo que permite que el cuerpo se mantenga ágil a lo largo de toda la vida. La pérdida de masa muscular y el sedentarismo son algunas de las causas de la disminución de la potencia muscular en personas mayores. Implementar programas de entrenamiento adecuados para la fuerza y la agilidad puede mejorar la potencia y agilidad en personas mayores y disminuir el riesgo de caídas. El Colegio Americano de Medicina Deportiva y la Asociación Americana Nacional de Acondicionamiento recomiendan entrenar 2 días la fuerza muscular y 1 día la agilidad con intensidades moderadas a altas.